lunes, 27 de septiembre de 2010

trastorno delirante

1.- El paciente expresa una idea o una creencia con una persistencia o fuerza inusual.

2.- Esa idea parece ejercer una influencia excesiva, y su vida se altera habitualmente hasta extremos inexplicables.

3.- El individuo tiende a estar sin humor e hipersensible, especialmente respecto a su creencia.

4.-Tiene un carácter de centralidad:
independientemente de lo improbable que sean las cosas que le ocurren, el paciente lo acepta sin casi cuestionárselo.

5.- Si se intenta contradecir su creencia es probable que levante una fuerte reacción emocional, a menudo con irritabilidad y hostilidad.

6.-
La creencia es, cuando menos, improbable.

7.- La idea delirante ocupa una gran parte del tiempo del paciente, y abruma otros elementos de su psique.